Así se inventaron los abanicos

Seguro que más de una vez has hecho dobleces en una hora de papel para formar un abanico, pero sabes cómo se inventaron estos curiosos objetos que ayudan a refrescarnos cuando hace mucho calor. Aquí te contamos todos los detalles.

Los abanicos existen desde hace miles de años. Los faraones ya los utilizaban en el Antiguo Egipto, donde era grandes hojas de palmera que se agitaban. Más similares a los abanicos actuales eran los que se conocían en China y Japón y fueron estos los que los navegantes portugueses llevaron hasta Europa, y se popularizó sobre todo en España donde incluso se transformó en un accesorio que no podía faltarle a ninguna mujer. Hasta desarrollaron un lenguaje secreto de señas con la forma de sostener el abanico.

Los abanicos estaban formados en sus primeros tiempos por varillas de materiales valiosos como marfil o madreperla y por eso solo eran accesibles para las damas de la corte del rey. Eran pintados a mano con paisajes o figuras humanas. Algunos también incluían trucos como imágenes diversas, según para qué lado se abrían. Con el se incorporaron materiales menos costosos y se popularizaron los abanicos entre gran parte de las mujeres españolas. Aunque hoy en día es un elemento no muy caro, requiere de habilidad para manejarlo con elegancia.

Fuente: DPA