La pelusa viajera

La pelusa viajera

En el desván de una casa había juguetes viejos, muebles y mucho polvo. Allí vivía una familia de pelusas, quienes desde arriba observaban a los niños jugar y correr por toda la casa.

Un día que los niños visitaron el deván, la pelusa más pequeña se pegó al pantalon del niño y viajó junto a el durante todo el día. Estaba asombrada de todo lo que había afuera y con admiración observaba las paredes, los muebles y las pinturas.

Todo era brillante, tenía color y parecía nuevo porque todo estaba limpio. Y aunque la limpieza la incomodaba, apreciaba con alegría aquel espectáculo de nitidez.

Al día siguiente sintió que retumbaba un aparato que parecía una gran maquina traga pelusas. la señora la pasó por la alfombra y la pelusa fue succionada por un aire tremendo. Tanto fue el aire que hasta ella quedó limpia.

La señora dejó la máquina en el desván y fue así como la pelusa regresó con su familia, pero estaba tan blanca que parecía un copo de nieve. Al verla, su familia la abrazó y una nube de polvo cubrió otra vez a la pelusa.

Antonio Martínez Cabrera

Adaptación 189 palabras