¿Se pueden contagiar los aplausos?

 

Seguro te ha pasado que estás en un acto del colegio y si alguien aplaude antes de tiempo, se te contagian las ganas y aplaudes tú también. Pues no te apenes porque se ha comprobado que al igual que la risa y los bostezos, aplaudir ¡es contagioso!

Según un estudio sueco, si tan solo un pequeño número de personas comienza a aplaudir, el hecho puede extenderse por todo el público de un auditorio. Además, solo con que uno o dos individuos decidan dejar de aplaudir, el aplauso terminará.

Los investigadores creen que aplaudir es una forma de “contagio social” que refleja cómo las ideas y las acciones ganan y pierden su impacto. Actualmente se puede comparar esta reacción en las redes sociales como Facebook o Twitter cuando le das “me gusta” y comentas algo que tus amigos ya han comentado.