En esta semana se concentran las actividades religiosas más importantes de la comunidad cristiana del mundo.

La Semana Santa se establece en la primera luna llena que ocurra después del solsticio de primavera, es decir, posterior al 21 de marzo. Así, la Semana Santa varía entre esa fecha y el 19 de abril, según el ciclo lunar.

La semana inicia con la conmemoración de la entrada de Jesús a Jerusalén, llamada popularmente Domingo de Ramos.

Del Lunes al Miércoles Santo se realizan velaciones de las distintas imágenes que saldrán en procesión durante la semana. Durante estas, la elaboración de alfombras y huertos con ofrendas de frutos consechados en la región, son cotidianos en la mayoría de parroquías.

Durante la noche del Jueves Santo se recuerda la institución de la Eucaristía a través de la celebración de la Cena del Señor, en la última cena de Jesucristo con sus discípulos.

El Viernes de Dolores a Jesucristo se le condenó a morir en la cruz y es por ello que se representa el pesaroso camino hacia el monte Calvario, donde murió, según las escrituras. En este tiempo se invita a la reflexión y a la oración.

El Sábado de Gloria se hace la vigilia pascual, en espera de la resurrección de Jesucristo. En este día se realiza la procesión de La Soledad, en la que se representa a la Virgen María vestida de luto.

Durante la noche del sábado se realiza la bendición del agua y el fuego, que es el momento culminante antes del anuncio de la resurrección de Cristo.

En la mañana del Domingo de Resurrección se anuncia y se celebra la derrota de la muerte a través de la resurrección del Hijo de Dios.